Posturas: Utthita Trikonasana

Esta postura o asana, llamada comúnmente Triángulo, es una de mis favoritas. La manera en que mi cuerpo se elonga es impresionante, pero al mismo tiempo todos los músculos están trabajando lo que me hace sentir fuerte.

Utthita, término en sánscrito, significa extendido. Y se refiere a los brazos abiertos, uno hacia abajo perpendicular al mat y el otro hacia arriba, perpendicular al techo. Los brazos están abiertos, creando que el pecho y el corazón se abran de la misma manera.

La mejor manera para llegar a esta postura, es desde Virabhadrasana II o Guerrero II. Extiende la pierna que está doblada (al frente del mat), mueve las caderas hacia atrás y al mismo tiempo guía el torso hacia adelante con los dedos, mano y brazo delantero. Ese brazo que ayudó a mover el torso hacia adelante va hacia el mat, colocándolo en la parte de afuera del pie delantero. Si no eres muy flexible o si eres principiante, ocupa un bloque abajo de las yemas de los dedos para ayudar a subir el suelo hacia tí, creando mayor abertura en el pecho y en los brazos. Si no tienes un bloque, coloca tu mano en la pantorrilla.

El otro brazo está apuntando en dirección al techo. Las dos piernas están activas, con los músculos trabajando. Recuerda de doblar ligeramente la rodilla delantera, para evitar una lesión al hiperextenderla.

La idea de esta pose es de crear triángulos con el cuerpo, piernas, brazos. Por lo tanto, el torso tiene que estar paralelo al mat. Trae la mano del brazo que está extendido hacia el cielo hacia tus costillas superiores y revisa que no estén creando una curva, tienen que estar planas, creando una línea recta. Tu vista puede estar hacia el suelo, hacia un costado o hacia el techo, lo que sea más cómodo para tu cuello. Relaja los hombros y rótalos hacia atrás y abajo, creando una mayor abertura en el pecho y más espacio para crear una torsión.

El abdómen está trabajando, protegiendo la columna vertebral; los brazos están trabajando, elongando; en cada inhalación estira la espalda desde la corona de la cabeza, en la exhalación gira el hombro superior hacia atrás y el hombro inferior hacia adelante, para eventualmente tener una línea con los brazos y hombros.

Hay personas que son más abiertas de caderas y pueden rotarlas para abrirlas, pero no todos podemos, así es que no sientas frustración. Esa es la gracia de yoga, que trabajamos con nuestro cuerpo, con nuestras limitaciones, para llegar a nuestro potencial máximo, el cual cambia cada día, con nuevos desafíos y nuevos objetivos, permitiendo que esas limitaciones se minimicen hasta desaparecer.